Mal educados

Buenas y santas,

llevamos años escuchando que la generación presente es «la más preparada de nuestra historia». Sin embargo nos encontramos en un momento de regresión social sin precedentes. Como es posible que estas dos circunstancias, que parecen contraponerse, concurran en un mismo momento?.

Según un informe presentado por la OCDE en 2009, el 39 % de los jóvenes entre 25 y 34 años poseen una titulación universitaria, mientras que la media de los paises de la OCDE es de 34 %. Por otro lado, la capacidad científica de nuestro país nos coloca como la novena potencia mundial en número de publicaciones científicas.

Estas cifras son solo el reflejo cuantitativo de nuestro sistema educativo de nivel superior. Sin embargo, si evaluásemos dicho sistema según los niveles de impacto en la sociedad, no creo que haya razones para ser positivos.

Sir Ken Robinson llevaba años hablando de como el sistema educativo que se nos ha impuesto responde a un modelo de sociedad de la revolución industrial que ya es obsoleto. Es un sistema que establece una jerarquía de materias encabezada por las matemáticas y que desprecia la artes relegándolas a las últimas posiciones, que mata la creatividad.

Uno de los más evidentes signos de que el actual sistema educativo no se adapta a las necesidades de la sociedad es su incapacidad para dotar a los individuos de valores de independencia y libertad, entendiéndolos como la posibilidad de tener el control de tu vida en tus propias manos. Esto se refleja en la escasa vocación emprendedora entre los titulados universitarios, que solo eligen en un 3 % el autoempleo como la primera opción, frente al 40 % de la media de los europeos o el 65 % de los estadounidenses.

Una de las grandes reflexiones de la sociedad para los próximos años debe ser el cambio radical del concepto educativo, yendo más allá del debate sobre la dotación de medios. La escuela es el lugar de construcción de la persona durante el aprendizaje, la experimentación, el entrelazado de vidas intergeneracional. Y la implicación de todos los actores debe ser completa. Un proceso al que debemos de adherirnos de forma voluntaria y libre.

Deja un comentario